Reseña ∙ Martina con vistas al mar ∙ Elísabet Benavent


Martina con vistas al mar | Elísabet Benavent | Romántica | Ficha
Si te llamas Martina, llevas siempre la melena recogida, eres absolutamente cerebral...
Si te has formado para ser chef y perteneces al equipo de El Mar...
Si has sentido un chispazo al conocer a tu jefe, Pablo Ruiz, excéntrico cocinero con estrella...
Si no soportas su indumentaria hípster, pero te irías a cualquier parte si él te lo pidiera...
Eres sin dudarlo la protagonista de esta historia...
Y tu vida, tan ordenada, está a punto de cambiar.
Antes de empezar con la reseña me gustaría recalcar algo: "Me encanta esta autora y todo lo que escribe". He leído todas sus novelas y todas han calado hondo. Te ríes, lloras, sufres, te emocionas y sueñas con tener una historia romántica mínimamente parecida a la que cada protagonista vive, por lo que desde aquí, desde mi pequeño y humilde rincón, recomiendo a todas las lectoras que todavía no se han estrenado con Beta Coqueta que lo hagan, no se arrepentirán. 

Como he comentado, todas las novelas de la autora me han gustado mucho, algunas más que otras, pero quizá con "Martina con vistas al mar" me he quedado un poco fría. No sé si esa es la definición correcta pero es la que ahora mismo me sale escribir, quiero aclarar antes que nada que el libro me ha gustado y que todavía falta dar mi opinión sobre la segunda novela que completa la bilogía de "Horizonte Martina", pero he tenido un problema con la protagonista que nunca antes había tenido con Valeria, Silvia y Alba. Es verdad que nos encontramos con un personaje muy real, de carne y hueso con aspiraciones y problemas de una persona de la calle, no es el perfecto estereotipo de fémina que suelen protagonizar las novelas románticas, y por ello me quito el sombrero como siempre ante la autora. ¿Cuál ha sido mi problema entonces?, que Martina no me ha gustado, no me ha hecho reír como las anteriores (y odio las comparaciones, pero en este caso es inevitable), su carácter antisocial no ha dejado que sienta empatía por ella, me ha desquiciado un poco que sea un personaje que en un segundo opina una cosa, y de repente por x motivo piense lo contrario. Sin embargo no todo de ella es negativo, es una mujer fuerte, con los pies en la tierra como nos tiene acostumbradas Benavent con sus chicas y cuando se dejaba llevar y liberaba su mente... era estupenda.

Luego está Pablo, ¿qué puedo decir de los hombres que Beta Coqueta crea para el deleite de sus lectoras?. Me ha encantado, desde su rollo hipster, su profesión como cocinero, hasta su idealismo por el romanticismo y el fuerte carácter que a su vez posee. Lo único a lo que le pongo un pero es a su físico, que no es mi estilo (Víctor, Hugo, incluso Javi) y a la hora de imaginar momentos subidos de tono pues me quedaba un poco fría y le ponía otra cara al pobre chico, aún así está bien que la autora haya cambiado un poco el registro de hombre físicamente perfecto. 

La relación entre ambos protagonistas ha sido contada de una manera perfecta, realista, desde el primer momento en que se ven, la ilusión de "me gusta y le gusto", las miradas cómplices, incluso la forma en que tienen de divertirse y vivir la vida a cada segundo. El escenario principal en el que todo sucede ha sido el restaurante donde ambos trabajan, y conocer un poco más el mundo de la cocina profesional ha sido un placer para los que disfrutamos y respetamos ese arte. 
Otra parte importante de esta historia son sus personajes secundarios, a los cuales se les ha dado más importancia que los últimos libros publicados de la autora, cosa que aplaudo y que además me han hecho tener diferentes sentimientos entre ellos. La primera es Amaia, una de las mejores amigas de la protagonista y de la cual me he hecho fan, la adoro, desde el dedo gordo del pie hasta el último pelo de su cabeza, si ella hubiese sido la protagonista de esta historia no tendría nada que objetar sobre el asunto. Raramente maravillosa. Javi... el hombre perfecto, no se le puede describir de otra forma. Los amé a los dos. Y por último Sandra, odiosa, de verdad que he intentado comprenderla, ponerme en su lugar, pero no, imposible.

La historia ha sido narrada en primera persona desde el punto de vista de Martina, aunque también hay capítulos sueltos en los que la voz cantante es la de Pablo, y eso es de agradecer porque de esta manera el lector conoce mejor los puntos de vista de cada protagonista. Con un lenguaje personal que caracteriza a la autora y que como siempre, nos introduce en la historia sin darnos cuenta, viviendo así cada acción, palabra o sentimiento que nos describa.

"Martina con vistas al mar" es la primera parte de una historia real, humana, tierna, romántica, fresca y natural que te embaucará desde la primera hasta la última de sus páginas. Eso es un sello indiscutible de Benavent.

No hay comentarios:

Publicar un comentario